Estas Directrices, las primeras de su tipo, proporcionan orientación a las autoridades de detención, las autoridades de investigación, los organismos humanitarios y otros sobre la prevención de las muertes bajo custodia. Reflejan el derecho, la política y las mejores prácticas internacionales y ofrecen una herramienta práctica tanto para los profesionales como para los responsables de la toma de decisiones...