Arnold desapareció hace casi ocho años. Su madre Otilia recuerda que la última llamada que le hizo a finales de enero de 2015 fue desde México. Arnold quería que sus padres supieran que había intentado cruzar la frontera hacia los Estados Unidos de América. Su esposa y sus dos hijos ya estaban allí y él quería desesperadamente reunirse con ellos.
Un mes más tarde Otilia se enteró que la motocicleta que Arnold conducía había sido encontrada en un depósito de chatarra en México, con impactos de arma de fuego. Desde ese momento no tuvieron más noticias de Arnold. Con el corazón destrozado, los padres emprendieron la búsqueda de su hijo y siguen aún esperando novedades acerca de la suerte que corrió.
De acuerdo con datos del Proyecto Migrantes Desaparecidos implementado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en las Américas se han informado 6.941 muertes o desapariciones de migrantes desde 2014. El proyecto ha registrado más de 350 incidentes que involucran a hondureños, habiendo ocurrido la mayor parte de ellos en la frontera entre México y los Estados Unidos, como ha sido el caso de Arnold, el hijo de Otilia.